jueves, 24 de diciembre de 2009
lunes, 23 de noviembre de 2009
Otro día en la playa
Mirar alrededor y ver sólo arena en la que poder jugar sin preocupaciones y en total libertad.
A ver cuándo es la próxima. Como no, os dejo prueba gráfica de la visita. Saludos.
Continuará
miércoles, 11 de noviembre de 2009
¡Tula tiene familia!
Os lo prometí, y ahora os lo cuento. ¡Tula ya tiene nuevo hogar! Finalmente no se ha movido mucho, vamos que no ha ido lejos. Y es que se ha quedado en la familia, así mantiene los apellidos y no hay que hacer papeleos.
La verdad es que la pequeñaja, aunque para mi es una lata, se hace querer y finalmente dejó prendaditos a los padres de mi dueña. Pobres, no saben la galga que les has caído encima.
No podemos dejar de agradecer la colaboración y ayuda prestada por Margara, representante de
Ahora os traigo un vídeo para que os fijéis en la evolución del bichito, de Tula. Seguro que notáis su mejora. Eso sí, antes de darle al "play", os recomiendo coger unas “popitas”, porque esto es una superproducción, guauf, guauf, el vídeo es más largo que levantar la pata en una calle en cuesta, ya me entendéis.
Además, hemos elaborado un segundo vídeo con fotos de todos los integrantes de la gran familia de cuatro patas. A mi ya me conocéis, la elegante y estilizada Greta (no sigáis que me ruborizo), por supuesto la galguita Tula, Yoli y Lucas, madre e hijo, que se han visto asaltados por la nueva horda de galgos hambrientos siempre de mimos, cariño y comida, claro, guauf. Por último, como artistas invitadas, la gata Trico y su hija Paca, que tienen que soportar ahora a Tula.
Esperamos en breve ofreceros nuevos contenidos que os sigan ilustrando como lo venimos haciendo hasta ahora.
Aquí la superproducción equivalente a "Lo que el viento se llevó y jamás devolvió", o a los culebrones "Cristal" o "Doña Bárbara" (después santificada y llamada, por tanto, Santa Bárbara).
Y aquí el vídeo extra. Disfrutadlo.
Continuará...
lunes, 19 de octubre de 2009
Recibo una "pequeña" e inesperada visita
Un vídeo vale más que mil palabras, ¿no era así?
Ahora esperamos la llamada de una asociación pro-galgos que puede hacer frente al cuidado de Tula y le busque un hogar, ya que conmigo mis dueños tiene más que suficiente en su pisito XXS.
Seguiré informando de mi nueva amiga de "sofá".
Continuará.
jueves, 24 de septiembre de 2009
Un horizonte verde y azul
A medida que avanzaba con mis amigos, el “run run” se hacía más fuerte, y la maleza desaparecía, dejando al descubierto una enorme superficie llena de aquella tierra, y al fondo, como en el horizonte, se unía al cielo azul algo que se movía con colores verdosos. Era enorme, y me quedaba claro que era de donde venía aquel sonido. Mis orejas no fallaban.
Mis amigos se pararon, miraron a ambos lados, parecían buscar a alguien, pero no había nadie. Me sentía ansiosa, entonces se agacharon y me quitaron la cadena. Fue como un pistoletazo de salida. No sé aún muy bien por qué, pero comencé a correr y correr, mucho, en todas las direcciones, sin control, a lo loco.
Mis patas se hundían en aquella tierra, dejando tras de mi una pequeña nube blanca. Mis amigos me miraban asombrados, y ellos comenzaron también a correr. –Estos no me ganan a mí- pensé. Les alcancé y adelanté antes de que se dieran cuenta…pero tuve que frenar…uff que frío estaba aquello verde…era agua, ¡cuánta agua!
Entonces mis dueños se acercaron a mi para preguntarme ¿Te gusta la playa, Greta?
Os dejo un vídeo de mi aventura...
lunes, 24 de agosto de 2009
Maestra en Yoga tras mucha práctica
Muchos creen que los galgos nos llevamos mucho tiempo tirados, durmiendo o aprovechándonos sobremanera del sofá. Pero no todo es pereza y desidia.
El tantra amigo, el relax, la meditación y la concentración. Todo ello para llegar al equilibrio y a la paz interior.
Quizá haya mucho incrédulo suelto que opine que todo es simple holgazanería. Pero como una imagen vale más que mil palabras, y con efectos pedagógicos en la iniciación del yoga, os dejo un par de fotos ilustrativas.
Flexión:
Extensión:
Continuará...
miércoles, 12 de agosto de 2009
¿Un té? - Sí, por favor
Este misterio que tanto les traía de cabeza fue resuelto en nuestra primera visita al veterinario. Éste, tras revisar mi fina línea y mi elevado grado de elegancia y distinción, concluyó que yo tenía marcados rasgos de galgo inglés...of course my friend!
Así que emplazo a todos mis colegas cánidos, británicos o no, a tomarse conmigo una agradable taza de té. Recordad, a las 5 de la tarde, ni un minuto antes ni un minuto después.
Continuará
sábado, 8 de agosto de 2009
Reiniciando mi vida
Fui abandonada, tirada cual colilla una vez que había sido apurada al máximo. Afortunadamente mi colilla no fue pisoteada como otros compañeros míos, que perecen ahorcados, quemados o arrojados a un pozo. Yo tuve la suerte de, simplemente, ser abandonada.
Muy probablemente, como "buen galgo", fui criada y explotada con el único fin de darle beneficio y diversión a un cazador. En alguna de las salidas en busca de liebres pisé un cepo, que me seccionó uno de mis dedos y me fracturó otro. Mi dueño, viendo que ya no le sería útil, me dejó tirada, abandonada. Le había dado mis años de juventud, mi velocidad, mi agilidad y pericia, y ahora, que era yo la que necesitaba ayuda, obtenía tan triste recompensa.
No desfallecí. Pese a mis problemas con la pata, tiré para delante, sobreviviendo con la bondad de algunos buenos humanos que me alimentaba de sobras y pienso, y de mi nueva faceta de buscavidas hurgando por las basura en busca de algún manjar más que llevarme al estómago.
Así estuve casi 4 meses, bueno eso me han dicho, que yo el calendario como que lo controlo poco. Pero entonces, como decía al principio, vino el shock. Una noche de verano, hace pocas fechas, mientras dormía tranquilamente al fresco, se me acercó alguien. Yo estaba sumamente relajada, no sabía quién era, pero me ofreció su mano para que la oliese, y así hice. De repente me vi cogida en peso cual pluma, la verdad es que mantengo la línea, y transportada en coche. ¿Dónde me llevan? ¿Qué ocurre?
No tenía ni idea de lo que estaba pasando, estaba petrificada, desorientada y extremadamente asustada. Pero lo que sí tenía claro esa noche era que mi vida iba a cambiar.
Continuará...